Alessa´s
Cry + Nuclear Antichrist + Krypticy, Sevilla, Sala Holländer
(19/01/18)
Primer
bolo al que acudíamos en este recién iniciado año metalero de
2.018, también yendo como medio colaborador. La Holländer no
defrauda y nuevamente nos tuvimos que ir al bodegón de turno a
comernos un serranito y bebernos unos kankarros hasta que cerca de
las 22:30h afilaban cuchillos los locales e imberbes (sólo en lo de la
edad; musicalmente ¡cómo van madurando!) NUCLEAR
ANTICHRIST.
Quien
siga a EdeM sabe que ya les hemos visto tres o cuatro veces, y
siempre con buenas impresiones. Ilusión, ganazas, técnica a más,
brutalidad bien llevada, feeling entre sus miembros y con el público,
a quien saben ganarse y arengar como pocas bandas (descaro
consecuente de su juventud, ¿o habría que decir que más bien del
risueño y loco de su bajista, el Sr. Skwigelf?). Sea
como fuere, Nuclear y sus LegionsTracks suenan potentes y firmes, con
temas que tendrán que ir puliendo pero que pronto devendrán en
conocidos y reconocidos. Desentrañaron lo que será su álbum debú,
sus seis plagas, de la siguiente manera.
Empezaron
con “Ultrarapid Death” y siguieron con “Nuclear Legions”, ya
habituales de sus set list. El
tercer corte, “Killing Spree” (una señora matanza), nos llamó
la atención, al ser más oscuro, con acordes y atmósfera de bandas
del género Black Metal, y de ejecución muy veloz.
Con
el cuarto cañonazo convocan un “Wall of Death” (Nuclear
Death)
entre las escasas pero fieles 30-40 personas presentes en la sala.
Sanas hostias (los pogos se repetirían continuamente) y risas a
ritmo de contundente Thrash Death, composición ésta mismamente
rápida con estructura guitarrera de peso, muy currada. La voz se nos
presenta más madura, podríamos decir, y el bajo y la batería
(sobre todo el menudo de las baquetas) suenan potentes, contundentes.
Los
dos siguientes en caer nos pasaron algo desapercibidos y nos
encajamos ya en el postrero y siempre bien recibido doble cover de
Death/Slayer: “Crystal mountain/Raining blood”, que les queda
genial, aunque la voz nos sonó algo baja. Aquí daremos toquecito a
quienes gustan solo de tributos/homenajes: están mu
bien, pero un concierto de banda novel, joven, pujante, que pelea en
el local y en el escenario temas propios y encima te regala algún
cover… ni punto de comparación.
Deseando
escuchar la primera producción artística de estos Nucleares, un EP
de 6 temas, de título homónimo y que saldrá en pocas semanas.
Set
list facilitado por la banda:
ultrarapid Death, Nuclear legions, killing spree (Game of Destiny),
my worst Enemy, in Death We Trust, reaper Command, crystal
mountain/raining Blood (Death/slayer cover)
¡Ojo con estos spree
killers; son asesinos/a itinerantes que dejan huella sangrienta por
donde pasan…"
Tiempo
para opinar junto a mi compañero Javier Barrera de la actuación de
Nuclear Antichrist. Esto nos decía J.B.: "No soy seguidor de ese estilo y no puedo ser muy objetivo pero les vi juventud, ganas y creo que con tablas pueden conseguir atraer a su público pues no lo hacen nada mal. Además, se agradece ver menos canas y/o arrugas encima de un escenario. Van en buena línea también en el aspecto de cuidar portadas, imagen, etc."
ALESSA´S
CRY
puso toda la carnaza en la parrilla. Imagen cuidada con el cartelón
grande de la portada del disco en un lateral de la sala (el escenario
ya sabemos que es pequeño y no tiene para sujetar lonas o se hace
difícil) y los dos rollers con motivos del videojuego “Silent
Hill”, unos bichejos que aparecen en la contraportada del disco.
Vimos
a una banda más consolidada y asentada que nunca, sonando
milimétricamente conjuntada. Instrumentalmente es un grupo de
notable, bien liderado por Odigir Olaf (felicidades, padrazo) como
vocalista versátil y guitarra principal pero muy bien arropado en
ambas funciones por Antonio Medina, quien con su voz clara y fina
aporte coros solventes y algunas estrofas más, aparte de técnica a
las 6Cuerdas. Al bajo está un febril e intenso Manuel Medina (sí,
hermano), que no para quieto en cada show, vocalizando letras y
haciendo grueso el sonido de Alessa´s. Y atrás, el más sosegado
de los cuatro componentes, como en una cueva, machacando parches, Boris Rodas, dando consistencia percutiva.
Esta
vez, nos decían, iban a “full show”, presentando temas nuevos.
Tras la intro de rigor, ambiental, para situarnos, arremeten con un
muy thrashero y con dejes muy Metallica “White Claudia”, en
especial en estribillo, armonioso total, bello en melodía.
Las doce manos de
la Asfixia es uno de nuestros cortes favoritos. Me recuerdan
totalmente a la que para mi es la etapa clave del sonido Göteborg, a
aquellos In Flames del Whoracle; siempre digo lo mismo, pero es que
es así. Melodía a raudales con estructuras neoclásicas. Un dechado
de virtudes técnicas. ¡Bravo!
La
siguiente propuesta, “Final warning”, nos recuerda a J. Barrera y
a mi a unos acelerados Raimbow, con estructura del Heavy más clásico
pero con guturales. Ahí se aprecia lo variopinto del sonido
Alessa´s, y se agradece. Muy melódico nuevamente, con gancho y con
un coro
claro
del guitarrista Antonio Medina muy efectivo como contrapunto a la
oscuridad preponderante. Hay unos segundos instrumentales a mitad del corte que me pareció un
guiño al pasaje "The Funeral of Queen Mary" de la B.S.O. de “La
naranja mecánica”, pero aguzando oído y comentando con la banda, no es así, sólo un mínimo parecido.
“The
Savior” nos resultó algo más experimental, con unos teclados
disparados que algo se apreciaban, de nuevo con voces limpias como
apoyo a la principal, que realmente hacen las veces de segundas
voces.
Nos
dan un respiro con un interludio en forma de vals, que queda genial y
original. Se nos vienen a la cabeza nuevamente Raimbow y el Sr.
Malsteem. Aquí apreciamos la valía de estos músicos. Chapeau, pero
de copa, para este "Headscape..."
En
la siguiente tralla, “5 minutes to die”, surgiría un
corrillo/pogo de diversión y mamporros y constatamos que los de
arriba también disfrutan enormemente de lo que hacen.
Al
son de “Scars” vuelven al Thrash más clásico mezclado con el
Death sueco del que hablábamos. Nos encanta.
Las
ocho cuerdas de Odigir tienen como en cada concierto su momento de
gloria con "Slenderman", propiciando un sonido más grave, denso,
grueso. Resurge la combinación voces limpias/sombrías, en un track
de onda más pausada, más Doom como nos apuntaba Javier B. quien comentaba a la finalización del concierto que la banda le había sorprendido bastante pues se esperaba un sonido más radical y se encontró con una música con muchos matices.
Es
tiempo ahora de un cover, “Nemesis” de Arch Enemy. Quizá fuera
el tema que menos nos convenció, no del todo conseguido, pues las
guitarras se escucharon demasiado bajas, sin esa melodía
inconfundible de los Amott, White-Gluz y compañía. Sí nos gustó
la tonalidad de la voz de Antonio.
Otro
tema nuevo que cae, “The frozen throne” y nos vamos a la última
de la noche, otro ya habitual y temazo como es “Mother love”.
Y así acaban,
extasiados y casi enfermos (el bajista supimos que sí lo estaba
realmente) pero satisfechos, según pudimos comprobar luego.
¡A
por ese segundo disco!
Íbamos
con bastante retraso y solo pudimos
quedarnos a presenciar 4-5 temas de los malagueños KRYPTICY
quienes
practican un Death técnico bastante bruto. Nos quedamos de piedra
con el salvajismo contenido del baterista, que con cada golpe parecía
que iba a descuajaringar el set de tambores y platos.
Con
una alineación sui generis con el bajista tomando protagonismo en el
centro del escenario y el vocalista y guitarrista a un lado del
mismo, fueron soltando perdigonazos de calidad que cayeron bien entre
las escasas 30 personas que resistían en la sala.
Nos
comentaba la gente de Los Palacios que por allí estaba que era una
banda de bandera y que fueron expresamente a Málaga en su momento
para verles en vivo. Con eso está todo dicho.
Esperamos
haya otra ocasión para ver completa una actuación de Krypticy y
poder constatar esas buenas sensaciones percibidas de forma mínima.
Os dejamos unas cuantas instantáneas.
Saludos
y nos vemos en el siguiente RockSarao. Being
oneself!
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Fotografía y texto: Pablo “Aliscar” Alarcón.
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Aporte extra en texto: Javier Barrera.
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Retoque digital: José L. Alarcón P.